Desinfección de la piscina por luz ultravioleta

La desinfección con luz ultravioleta es uno de los métodos más limpios y sencillos para mantener en óptimo estado el agua de nuestra piscina. El sistema consiste en un tubo iluminado con una lámpara que emite una radiación capaz de eliminar los microorganismos que se encuentran en el agua. La desinfección se produce sólo cuando el agua pasa por el tubo y no hace necesaria el uso de productos químicos para su mantenimiento. Este sistema, al evitar los gases del cloro, suele utilizarse para tratar el agua en piscifactorías, instalaciones de acuicultura, hospitales o empresas farmacéuticas. También en balnearios y Spas o piscinas de pequeñas dimensiones.

La luz ultravioleta la encontramos en el sol. Elimina fácilmente los gérmenes y bacterias, desinfectando así el agua de la piscina sin usar productos dañinos para las personas. En cuanto a su funcionamiento, el sistema filtra el agua y hace pasar el caudal por un depósito estanco donde se emite la radiación. Esta luz acaba con los gérmenes que infectan el agua y evitan que se reproduzcan.

A la hora de decantarnos por este sistema de desinfección que tener en cuenta cuestiones como el volumen de agua a tratar. A mayor cantidad de agua a tratar, más potente debe ser el equipo instalado, para aumentar así su capacidad germicida. Por otro lado, hay que prestar atención también a la regulación del pH. Unos valores alterados de pH pueden desaconsejar utilizar este sistema de desinfección del agua.

En cualquier caso, si optamos por el sistema de desinfección de la piscina por luz ultravioleta, nos encontraremos con algunas ventajas. Por ejemplo, evitaremos el acopio de productos químicos. Evitaremos a los bañistas el hedor a cloro y alguna reacción alérgica al mismo. El sistema es muy sencillo de instalar y también de mantener, además de ser automático. Y, por último, requiere muy poco esfuerzo para conseguir y mantener el agua de nuestra piscina en excelente condición.

No obstante, a pesar de la comodidad en el uso de este sistema, conviene no bajar la guardia respecto al estado del agua de la piscina. El encargado de su mantenimiento deberá comprobar regularmente el agua, para confirmar que el sistema de luz ultravioleta funciona correctamente o detectar posibles anomalías. Una falta de vigilancia y control puede desembocar en una mala calidad del agua de la piscina y poner en riesgo la seguridad de los bañistas.